Esto es lo que la actriz de Harry Potter y las Reliquias de la Muerte - Parte 2 compartió con la revista.
Sobre por qué dejó la escuela: "Dejar Brown no tenía nada que ver con la intimidación, ya que he visto que en los medios de comunicación han dicho eso. Nunca he sido intimidada en mi vida. Al igual que muchos otros estudiantes en la Universidad Brown, quería pasar mi tercer año en el extranjero".
Sobre el enojarse al actuar: "Mi tutor de actuación dijo que lo más difícil para mí era enojarse. Casi se echó a llorar cuando trató de hacerme enojar. Le dije: 'No puedo hacerlo, yo no puedo hacerlo'. Guardo todo aquello que tengo reprimido en algún lado y siento que soltarlo sería espantoso, y dejaría de ser poderosa, sexy, y esas cosas que me dan miedo".
Sobre su auto-imagen en Hollywood: "Siento que si tengo que trabajar cuatro horas al día, y contar las calorías de todo lo que puse en mi boca, y tener que pensar en el Botox a los 22, y obsesionarse de cómo me veo todo el tiempo , me volvería loca".
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